No quadra

El tráfico regresa al barrio

Desde marzo del 2020 cuando en el país se decretó el confinamiento por el Covid 19, el tráfico en avenidas como la Doce de Octubre, o algunos puntos de la Seis de Diciembre, se redujo, dada la poca afluencia de gente que trabajaba o estudiaba en el sector. Sin embargo, la vuelta a clases presenciales en las universidades de la zona trajo consigo nuevamente este problema; ahora más intenso que antes.

En los últimos dos años, el mundo vivió un giro inesperado a causa del Covid 19. Se adoptaron nuevas formas de trabajo, de educación y hasta de entretenimiento. Uno de los campos que más se transformó fue el educativo. Las pantallas se convirtieron en el  aula de clase, mientras los espacios en universidades y colegios se cerraron sin fecha de apertura a la vista.   

El tiempo se alargó, al principio se pensó que sería “hasta el lunes”, pero pronto la incertidumbre se instaló en el mundo y fue evidente que la fecha de regreso a la normalidad estaba lejana. La convivencia con los amigos, maestros y nuestro entorno se vio afectada drásticamente, en medio de una situación desconcertante que tenía a todos en vilo.  

En medio de esto se instaló el debate sobre si las clases virtuales estaban siendo efectivas o si se debía volver a la presencialidad lo más pronto posible, debido a que las diferencias entre la nueva modalidad y las clases tradicionales fueron muy notorias.  Sin embargo, el avance y la gravedad del virus lo impedía. 

Después de casi dos años llegó el momento anhelado: el retorno a clases presenciales. No obstante, la afluencia de personas en distintos puntos de la ciudad hizo que la vuelta a clases traiga consigo el aumento de distintos problemas relacionados a la movilidad, incluyendo el tráfico. El sector de las Universidades no fue la excepción.

Desde el 7 de marzo del 2022, se inició el regreso a las aulas con aforo completo, como parte de las acciones emprendidas por las autoridades de turno con el fin de promover el regreso a la normalidad, aun con la pandemia en curso. Era notorio ver como en los días de más restricciones por la pandemia las calles lucían casi sin tráfico, sin embargo, la apertura de las clases presenciales sacaron a flote un problema recurrente en Quito: el tráfico.  

La congestión vehicular existe en sectores como: La Floresta, la avenida 12 de octubre, 6 de diciembre y en las calles aledañas por la alta presencia de vehículos en los que se movilizan trabajadores y estudiantes de la zona. 

La Agencia Metropolitana de Tránsito, AMT, implementó un operativo de movilidad en las afueras de 41 establecimientos educativos, con el fin de controlar el flujo de vehículos. No obstante, la medida no ha traído cambios importantes porque el tráfico se intensifica cada día más. 

Martha Rendón, moradora del sector, comenta que cuando no existe hora pico en las calles Lugo y Ladrón de Guevara no se evidencia tráfico. Sin embargo, en horarios concurridos sí se da una gran congestión vehicular. Según Rendón, en el redondel conocido como de las tripas y varias calles de La Floresta, hay una gran presencia de autos, debido a que no existe una zona de parqueo designada. Al no haber, las personas optan por parquear en las calles transversales.

De igual manera, la presencia de ciclovías se vuelve un grave problema al momento de encontrar parqueadero en esas zonas. Muchas de esas vías no se usan y al no hacerlo, quitan espacios que pueden funcionar como parqueaderos, lo cual incomoda a los moradores. Es importante considerar que el barrio La Floresta, por su ubicación en el centro-norte de la ciudad, constituye un lugar cercano a todo, por lo que es estratégico para vivir, sobre todo para quienes trabajan o estudian en los extremos de la ciudad. Para Martha, por ejemplo, quien es guía turística, vivir en este barrio le resulta beneficioso, ya que puede llegar sin mayor problema a su destino, el cual cambia constantemente por el tipo de trabajo que tiene.

Esta vecina considera que la vuelta a clases sí es un factor que ha influido en los problemas de movilidad que afectan a la zona y a la ciudad en general. 

Jorge Cisneros, sociólogo y antropólogo que vive en el sector, explica que en las calles Colón y Juan León Mera el tráfico puede ser realmente abrumador. Esto lo registra en un estudio sobre la movilidad de la ciudad que hizo hace algunos años. En este concluyó  que, aunque muchas veces se cree que el transporte público mal regulado es la fuente principal del tráfico, la realidad es que los autos particulares también lo son. Esto se ha evidenciado a raíz de la pandemia, debido a que muchos ciudadanos aún temen contagiarse del virus, por lo que prefieren transportarse en sus vehículos propios, en lugar de utilizar transporte público.

La gente supone que al hacer uso de su vehículo propio llega más rápido a sus destinos, cuando en realidad es todo lo contrario, explica el experto.

Por su parte, algunos vecinos del barrio consideran que el tráfico antes de la pandemia es igual que ahora, por lo que la vuelta a clases ha traído consigo esta “normalidad” de vuelta.

Video del tráfico a diferentes horas

Por otro lado, personas que laboran en el sector, creen que el tráfico no es solo un problema de este barrio, sino de toda la ciudad. Ellos también le apuntan al regreso a clase como la causa. Rafael Uribe, docente de la Politécnica Nacional, expresa que para poder llegar puntual a sus actividades diarias debe salir con mucho tiempo de anticipación, ya que la congestión vehicular está presente en todas partes, lo que le  genera malestar.

Según la Secretaría de Movilidad, el 75% de las personas que viven en Quito se trasladan en transporte público, el cual, a nivel general, presenta falencias. Para mejorar el sistema, el Municipio de Quito ha presentado varias propuestas.

Como primera opción está lograr un reordenamiento de las unidades de transporte. Así se evitará que existan varias líneas recorriendo las mismas calles. Otra propuesta es colocar bicicletas en distintos puntos de la ciudad para quienes opten por este tipo de transporte. Por último, otra de las iniciativas apunta a mantener la medida del Pico y Placa, la Zona Azul e intensificar los operativos policiales en las calles para evitar la congestión vehicular. 

Cabe señalar que la Agencia Metropolitana de Tránsito, AMT, en el 2020, puso en marcha un plan piloto para disminuir el tráfico, llamado “carril exprés” que consistía en habilitar tres tramos de vías para la circulación de vehículos livianos y dos solo para buses. Este tenía como objetivo, además de reducir el tráfico, bajar los índices de contaminación y optimizar el uso de vehículos particulares.

La ciudadanía también se ha unido a este tipo de iniciativas y ha intentado, por su parte, desarrollar algunas acciones. Rendón, no saca su vehículo en hora pico y si tiene que salir prefiere caminar hacia su destino. En tanto, …Reinoso, otro vecino del sector opina que lo ideal sería que la medida de aplicar un contraflujo en algunas vías se retome para de esa manera aligerar el flujo vehicular.

El tráfico en Quito y específicamente en el barrio es un problema de vieja data que ha tratado de ser solucionado a través de distintas alternativas, sin embargo, hasta ahora ninguna ha sido efectiva. Es tarea de las autoridades y de la ciudadanía unir esfuerzos para atenuar este problema que día a día afecta la tranquilidad de quien circula por el sector sea a pie, en transporte público o en auto propio.  

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